miércoles, 25 de marzo de 2015

Un giro inesperado

 “Hay que buscar la forma de trabajar con pocos recursos y hacer una virtud de la pobreza”

                                                                                                                                  (Andrés Hax)

    A comienzos de Marzo de 2011, Esteban y yo decidimos actualizar nuestros videobooks. Siendo conscientes que no teníamos demasiada experiencia en televisión ni cine como actores, nos grabamos y montamos nosotros mismos algunas secuencias y las colgamos en You tube. Hasta ahora, si he de ser sincero, mi videobook no ha recibido muchas visitas y muchos menos, pocas llamadas de directores de casting en hacerme un casting. Sin embargo, algo que parecía tan efímero, tan simple como hacernos un reel actualizado de nuestros trabajos como actores, tendría no obstante consecuencias inesperadas e interesantes.

Una tarde nos encontrábamos montando una de las secuencias frente al Final Cut. El programa de edición. Se nos ocurrió, repentinamente, como quedaría la secuencia en blanco y negro. Desaturamos los colores y nos encantó la fotografía de la imagen. Y fue entonces, como algo casi mágico, cuando surgió el germen de Fuera de foco. La conversación, que yo recuerde, fue más o menos así:

- José: Que guapa queda la imagen, así, en blanco y negro…
- Esteban: Si tío… además está todo muy bien enfocado e iluminado…
- José: Me encantaría hacer un largo así, en blanco y negro, con esta fotografía…
- Esteban: Pues vamos a hacerlo tío… - Afirmó sonriendo y bromeando –
- José: Bueno, primero tenemos que rodar Mientras llega Esperanza
- Esteban: Pero podemos rodar algo más sencillo. Con medios mínimos, con dos cojones.

Y su expresión comenzaba a iluminarse. Hubo unos segundos de silencio. Después, intuyendo las consecuencias de aquella conversación, pregunté:

- José: A ver, ¿sobre qué?
- Esteban: Pues no sé… pero sobre algo cercano, sencillo…
- José: Sobre lo nuestro…
- Esteban: Sobre la profesión…

Y otro silencio. Nos miramos, y explotamos a reír.

- José: Claro… sobre la frustración del actor…
- Esteban: Sobre los egos…
- José: La subjetividad del arte… Sobre los intereses en el mundo artístico…
- Esteban: ¡Claro! Sencillo, todo muy conversacional. Algo que podamos abarcar nosotros mismos…

Y un bombardeo de ideas e imágenes nos vinieron a la cabeza, embriagados, sin poder evitarlo, por la inspiración.

- José: ¡Eso es!, mira, podríamos contarlo todo en bloques, en secuencias diferentes. Como Café y cigarrillos de Jarmusch…
- Esteban: Si tío… y molaría que cada secuencia fuera un día de la semana.  – Lo miré entusiasmado – Que la peli comenzase un lunes y terminase un Domingo…

Me levanté, cogí un rotulador negro y fui directo a la pizarra blanca de la pared. Tracé una línea horizontal, una especie de boceto de estructura dramática. Algo así como un paradigma que seguiría la película. Partí la horizontal en siete partes.

- José: A ver… Me viene a la cabeza un guionista que quiere conseguir a un actor famoso para su peli…
- Esteban: Una actriz que se va de la profesión porque se va a casar con un tío con pasta del que no está enamorada…
- José: Mola… unos artistas que tienen que trabajar en curros de mierda y que no pueden evitar sentirse frustrados…
- Esteban: Un cantante que tiene una entrevista con un productor y se decepciona porque es un tío que solo le interesa la pasta…
- José: Si, narrar historias sobre diferentes personas de nuestro gremio que se encuentran confundidos, confusos, que les cuesta ver con claridad el camino... ¿Cómo se podría llamar?
- Esteban: Fuera de foco - Sentenció mi amigo -

Y aquella tarde, la explosión creativa desencadenada, a raíz de aquel simple videobook, siguió hasta altas horas de la noche. Había nacido Fuera de foco. Dos semanas después ya teníamos las dos primeras secuencias escritas. Y no quisimos esperar a terminar el guión completo. Teníamos el tratamiento, teníamos la historia, sabíamos como iba a terminar.

Casi enfermizos, con un mono de comenzar a grabar que no pudimos (ni quisimos) evitar, grabaríamos los fines de semana y con amigos actores que quisieran colaborar, como Peter Jackson con Bad taste, como Pedro Temboury con su Kárate a muerte en Torremolinos y como muchos otros cineastas que comenzaron a contar sus historias, seguramente, por ese mono inevitable de expresar, de poetizar con imágenes y sonido, de transmitir sensaciones y contar historias.

En definitiva, aquella noche, quedamos irremediablemente enganchados a Fuera de Foco y decidimos ponernos manos a la obra. Comenzar a escribir, dirigir, componer, montar y producir esa película, que significaba, al mismo tiempo, empezar una guerra con la realidad. Esta realidad era, lejos de la magia de la inspiración, algo crudo y duro, algo que podría dar al traste el proyecto a mitad de camino por miles de motivos; porque un actor no pudiera, porque no tuviésemos tiempo para grabar, porque no hubiera suficiente dinero, porque pudiera haber cualquier incidente técnico, etc… pero sobretodo, porque sencillamente, y como dice un refrán muy común, del dicho al hecho, hay un trecho.

La inspiración no dura siempre, es muy efímera. Ideas tenemos todos pero lo realmente difícil es acabar, terminar un proyecto, eso es ciertamente, muy, muy difícil. Titánico. Creo firmemente que la inspiración es solamente un empujón, una ayuda, pero hace falta otras cosas, como la constancia, la disciplina y el oficio.

Desde esa perspectiva, Esteban y yo empezamos la guerra, una guerra con muchas batallas por lidiar y que haríamos todo lo posible por ganar. Iríamos a por todas y con todas nuestras armas (básicamente, nuestra cámara, nuestro Mac, y nuestros amigos) nos adentramos en el campo en el campo de batalla.

                                                                                                                           José Manuel Montes.

domingo, 15 de marzo de 2015

Como comenzó todo
“El destino baraja y nosotros jugamos" (Arthur Schopenhauer)

    Antes de instalarme en Madrid, ya conocí a Esteban Ciudad. En Junio de 2004 yo me acababa de licenciar en Escuela Superior de Arte Dramático de Málaga y ya tuve claro que aquel sería mi último verano en Málaga. En Septiembre subiría y me instalaría en Madrid, era momento de ahorrar y de encontrar casa por aquellos lares.

Trabajé los meses de Junio, Julio y Agosto en las noches de verano como portero en La botica, un bar de copas muy conocido en Fuengirola y por las mañanas como payaso en cumpleaños y fiestas infantiles. Paralelamente, a principios de ese Verano de 2004, vino una compañía de teatro musical al palacio de los deportes de Los Boliches para representar durantes esos tres meses de Verano durante el Festival de Teatro musical Luís Ramírez, cuatro espectáculos musicales; Peter Pan, Aladdin, La magia de Broadway II y Hermanos de Sangre. 

Mi interés por esta compañía y por los espectáculos que representaban era, obviamente, muy especial. Yo ya conocía a algunos de los integrantes dado que esa era la segunda vez que venían. El año anterior, en 2003, repitieron verano en Fuengirola, con Peter Pan, Annie, La magia de Broadway I y Jeckill y Hyde. Yo tomé contacto con ellos porque hice un curso de teatro musical que impartía Luka Yexi, excelente coreógrafo y bailarín y también César Belda, genial director musical. Disfruté mucho aquel stage y por ello, en 2004, me dispuse a repetirlo.

Fue entonces cuando uno de los días en los que ensayábamos algunos de los números musicales del espectáculo cuando César me dijo:

 - Oye José, ¿Tú cantas no?
 - Pues… si – Respondí tímidamente. En realidad quise decir; Pues si, canto, pero en mi casa –
 - Pues déjame que hable con Luka y con Enrique y haber si te hacemos una pequeña prueba porque necesitamos cantantes de cabina.
 - Estupendo, pues cuando queráis. – Afirmé sin temor –

Poco después haría la prueba con César, el director musical y con Enrique Sequero, un cantante magnífico que formaba parte de la compañía. Ambos dieron el visto bueno para que entrara a trabajar con ellos. Esa oportunidad me dio la posibilidad no solo de ahorrar más dinero para mi partida hacia Madrid si no también de conocer mucha gente interesante, no sólo los ya mencionados si no también artistas de la talla de Eva Diago, Paco Arrojo, Roger Pera, Enric Llort, David Ordinas y Esteban Ciudad. Éste último formaba parte de la compañía y protagonizaba Peter Pan, aparte de otros personajes en los otros musicales. Nos conocimos, nos llevamos bien y fuimos buenos compañeros.

Al acabarse el Festival de Teatro musical, cada uno fue por su lado. Yo subí en Octubre a Madrid pensando en instalarme. Dispuesto a hacer todo lo que se supone que cualquier actor recién licenciado y lleno de ilusión hace cuando llega a la gran ciudad; redactar un buen Curriculum artístico, un buen videobook, unas buenas fotos y a continuación patearse todo Madrid buscando directores de casting y representantes que te consigan trabajo como actor con la esperanza de vivir de ello.

Así fue durante un par de años, cada uno haciendo proyectos por separado, no solo actuando sino  también escribiendo o dirigiendo pequeños proyectos. No nos veíamos si no era coincidencia en algún casting de algún musical o por la misma Gran vía.

Asistíamos, ávidos de información sobre como poner en marcha nuestro primer largometraje. También asistíamos a varios seminarios de diferentes directores como Fernando Trueba, Agustín Díaz-Yanes o Borja Cobeaga. Y nos preguntamos, ¿Cómo poner en marcha nuestra primera película?, ¿Tenemos que esperar a conseguir algún tipo de subvención para no perder el tiempo?, ¿A que las condiciones sean idóneas?, ¿A tener todas las localizaciones?

Cada vez estábamos más desesperados. Teníamos que hacer nuestra primera película lo antes posible. El guión de Mientras llega Esperanza ya estaba terminado, quizás habría que pulir un par de conceptos, pero ya se podría comenzar con la preproducción.

¿Podríamos hacer la película de forma independiente?, ¿sin necesidad de contar con una gran productora, ni con subvenciones del ministerio de Cultura, ni del ICO (Instituto de Crédito Oficial), ¿ni del ICAA? (Instituto de la Cinematografía y las Artes Audiovisuales), ¿Sería viable un proyecto de tal magnitud sin que muriésemos en el intento? Debíamos ponernos a investigar.

Para nuestra sorpresa, nos dimos cuenta de que muchos de los directores que comenzaron a hacer cine, empezaron con sus propios medios. Sin mucho más que una idea, una cámara y amigos.  Me resultó curioso que la mayoría se puso manos a la obra simplemente por las ganas alocadas de grabar su primer largo. Sin esperar nada en un futuro, simplemente por la necesidad de contar una historia. Por amor al arte.

Os dejo algunos ejemplos:

Cabeza borradora (1977)

Oscura e hipnótica, la primera película de David Linch fue rodada durante seis años, los que tardó su autor en reunir las 7.500 euros que necesitaba para completarla.

La canción del camino (1955)

Primera entrega de la trilogía de Apu, una de las grandes obras maestras del cine. Su director, Satyajit Ray, sólo necesitó 2000 euros parar filmarla.

Mal gusto  (1987)

Es una película de culto de bajo presupuesto dirigida por Peter Jackson y filmada en Nueva Zelanda. La película fue filmada durante cuatro años, principalmente en los fines de semana, todo con un presupuesto de 11.000 dólares. Jackson hace dos papeles en la película, el resto de los actores son amigos suyos.

El mariachi (1992)

Rodríguez escribió el guión de su primer largometraje mientras permanecía internado en las instalaciones de unos laboratorios de investigación como paciente de un experimento clínico remunerado. Este dinero, junto con la venta de una vieja casa que heredó de un tío suyo, sirvió para pagar el rodaje de su película. Planeó recuperar el dinero vendiendo la película en el mercado del vídeo doméstico mexicano. Robert Rodríguez escribió, dirigió, fotografió, montó y grabó el sonido con un presupuesto de 7.000 dólares. Mientras seguía investigando la forma de vender la película en el mercado del vídeo, Rodríguez fichó con un influyente agente de ICM. Fue entonces cuando Columbia Pictures compró los derechos y firmó un contrato de dirección de dos años con Rodríguez.

Clerks (1994)

Kevin Smith tuvo suerte; una inundación doméstica le permitió ingresar el dinero necesario para hacer una de las comedias más frescas de los noventa. La película está rodada en blanco y negro. Está realizada con presupuesto de apenas 27.575 dólares. Para adquirir fondos con los que poder realizar el filme Kevin Smith vendió parte de su extensa colección de historietas en 1993, a su vez utilizó entre ocho y diez tarjetas de crédito que tenían 2000 dólares como límite del mismo, utilizó también parte de los ahorros que poseía para sus estudios universitarios y finalmente utilizó el dinero del seguro del automóvil de Jason Mewes, uno de los actores, ganado por la pérdida de su coche en una inundación. La película fue filmada en 21 días.

Following (1998)

Antes de ser uno de los autores más prestigiosos de cine, Christopher Nolan debutaba con esta intrigante historia sobre un escritor y un ladrón. ¿Su presupuesto? 13,000 dólares.

Kárate a muerte en Torremolinos (2003)

De Pedro Temboury, ha sido clasificada como "La peor película de toda la historia del cine español".  No me extraña, teniendo en cuenta que una de las referencias del director es el considerado peor director de todos los tiempos, Ed Woods. Se rodó en 12 días y con un presupuesto de 6.000 euros. Posteriormente fue distribuida por Telespam.

La fiesta (2003)

La película se rodó en MiniDV, en 21 días y con poco más de 6000  euros.  Llegó a las oficinas de Buena Vista International (BVI) en España en forma de casette de vídeo, después de haber pasado por las productoras y distribuidoras más conocidas del país con una fría acogida en el mejor de los casos. En Buena Vista International vieron la cinta y decidieron apostar firmemente por la película cuando las esperanzas estaban casi perdidas.  En tan sólo 15 días BVI -The Walt Disney Company- financió el paso a 35 mm y la distribución en salas, involucrándose de forma muy activa y entusiasta en la finalización de la película. Al igual que la compañía de discos, y que otras muchas personas, habían sido seducidos por el encanto de una película pequeña y modesta pero llena de frescura y vitalidad.

Primer (2004)

El matemático Shane Carruth estaba harto de su trabajo y destinó sus ahorros, 6,000 euros,  a escribir,  producir y dirigir una aplaudida y compleja cinta de viajes en el tiempo.

The death of Michael Smith (2006)

En esta película policíaca rodada en Detroit, su director, Daniel Casey, gastó casi 1000 dólares en rodarla y enviarla a diferentes festivales donde ganó varios premios.

Colin (2008)

Mientras trabajaba como mensajero, el británico Mark Price rodó una original película sobre un muerto viviente con poco más de cincuenta euros. La cinta fue seleccionada en el festival de Cannes.


Estas son tan sólo algunos ejemplos de películas independientes, filmadas con medios escasos pero con mucho entusiasmo.  Estaba claro. Haríamos la película fuera como fuera. Se acabó el esperar. Debíamos arriesgar.

En febrero del 2011 me encontraba perfilando el guión de (el que yo pensaba que sería) mi primer largometraje, Mientras llega Esperanza.



Yo nunca pensé demasiado en hacer una adaptación al cine de esta obra pero Esteban y otros amigos me instaron  encarecidamente para llevarla a cabo. Él leyó la obra y como otros, río y se divirtió. Empezamos a hablar de la posibilidad de hacer un largometraje de la misma y mi cabeza empezó a ahogarse en un montón de posibilidades creativas para la historia que hasta el momento no había pensado.  "…Si, podría ser mi primera película...la historia ya está, solo hay que adaptarla al lenguaje cinematográfico…" En esos momentos, una fuerza inspiradora y creativa me invadió por completo y lo tuve claro, esa sería mi primera película, y la haría fuera como fuera. Sin embargo, el destino (?)  me preparaba un giro inesperado en la trama…


José Manuel Montes.


Sobre "Fuera de Foco".


viernes, 22 de abril de 2011

YA TENEMOS BLOG!!!

Poco a poco iremos actualizándolo y poniéndolo bonito... mientras... os contamos un poco.

"Fuera de Foco" es una película que habla de nosotros mismos. Habla de cientos de artistas, actores, escritores, músicos, directores... que intentan hacerse un hueco en una profesión complicada y a la vez satisfactoria. Es una película para y sobre todos ellos.

Ya estamos con los primeros ensayos, y el próximo Domingo grabaremos la primera escena de la película.
Estamos muy entusiasmados con el proyecto y sobre todo, de como van saliendo las cosas.
Los ensayos de esta semana están saliendo a pedir de boca. No podemos tener un reparto mejor para comenzar la película. Los actores se sienten cómodos con el texto y muy involucrados con la película, y eso hace que nosotros sintamos que va a ser realmente especial.
Lo mejor de todo, es que los actores han pasado por las situaciones que contamos, y eso hace que la actuación se convierta en "ser". La verdad que tiene el guión y la verdad que nos ofrece el estupendo reparto, nos pone las pilas para seguir adelante, con un proyecto que se hace más grande a medida que avanza.
Es duro... llevamos mucho tiempo dando vueltas a nuestra primera película, y al final... nos hemos decantado por "Fuera de Foco", y hemos decidido rodar ya!!!

FOCO VA!!!! 

Esteban Ciudad